A casi una semana del impacto devastador del Huracán Lidia en Puerto Vallarta, la situación en la colonia San Esteban sigue siendo crítica, con vecinos enfrentando condiciones precarias y un inminente peligro para al menos 20 hogares. La erosión desencadenada por el desbordamiento del río Pitillal ha dejado a esta comunidad al borde del colapso.
Las imágenes desgarradoras de casas a punto de desplomarse han conmovido a la población local y a las autoridades, generando un llamado urgente a la acción para brindar ayuda a quienes más lo necesitan en este momento de crisis.
Las familias de San Esteban se enfrentan a una situación desesperada, con la infraestructura básica gravemente afectada y el temor constante de perder sus hogares. Las calles inundadas, los escombros y la falta de suministros básicos están haciendo que la recuperación sea aún más difícil para esta comunidad afectada.
El río Pitillal, que normalmente serpentea apaciblemente por la región, ahora se ha convertido en una amenaza inminente. La erosión provocada por el huracán ha debilitado las bases de al menos 20 viviendas, dejándolas al borde del colapso. La urgencia de estabilizar la situación y evitar una tragedia mayor es evidente.