El Estadio Azteca de la Ciudad de México ha sido elegido como el escenario para el partido inaugural de la próxima Copa Mundial de la FIFA 2026, marcando un hito histórico al convertirse en el primer estadio en acoger tres ceremonias de apertura de este magno evento futbolístico. Este anuncio fue hecho oficial el 4 de febrero de 2024, destacando la importancia de México en la esfera futbolística mundial.
La edición de 2026 de la Copa Mundial de la FIFA se caracterizará por ser la más extensa hasta la fecha, con un total de 104 partidos que se disputarán entre 48 equipos nacionales. Los encuentros tendrán lugar en 16 diferentes sedes distribuidas en tres países: Canadá, México y Estados Unidos, prometiendo una celebración del fútbol sin precedentes en la región de América del Norte.
El arranque del torneo está programado para el 11 de junio de 2026, donde México, como país anfitrión, tendrá el privilegio de jugar el primer partido en su capital, en el emblemático Estadio Azteca. Este recinto, que ha sido testigo de momentos estelares en la historia del fútbol, incluyendo las finales de las Copas Mundiales de 1970 y 1986, y las actuaciones legendarias de figuras como Pelé y Diego Armando Maradona, volverá a estar bajo los reflectores internacionales.
Además de albergar el encuentro inaugural, México asegurará que sus tres partidos de la fase de grupos se jueguen en su territorio, con dos de ellos en el Estadio Azteca y el restante en Guadalajara. Este formato garantiza que el fervor futbolístico del país se mantenga en alto a lo largo de la competencia.
El Estadio Azteca, hogar de los clubes Club América y Cruz Azul de la Liga MX y frecuente anfitrión de la selección nacional de México, no solo es un coloso por su capacidad y su significado histórico. También se destacó en 2011 durante la final de la Copa Mundial Sub-17 de la FIFA™, cuando se estableció un récord de asistencia con 98,943 espectadores, evidenciando la pasión del público mexicano por el fútbol.
La selección de este estadio para abrir el torneo más grande en la historia de la Copa Mundial de la FIFA resalta no solo su legado, sino también la capacidad de México para ser centro de eventos deportivos de gran escala, prometiendo un espectáculo futbolístico que capturará la atención del mundo entero.